Hoy por hoy, las aplicaciones de movilidad y entrega de comida se han posicionado como una fuente alterna de ingresos a los esquemas tradicionales de trabajo
Cuando se habla de la economía “gig” o colaborativa no se pueden dejar de lado dos conceptos clave: flexibilidad y conexión. Estas dos particularidades permiten que este modelo económico sea utilizado como una fuente alternativa de ingresos pues funciona a través de aplicaciones móviles –como sucede en el caso de DiDi– a través de las cuales es posible conectarse y empezar a trabajar sin importar el horario o la ubicación.
DiDi, compañía, con presencia en varios países de África, Asia y Latinoamérica, que presta un servicio en el cual los pasajeros descargan una aplicación en su teléfono para acceder a servicios de transporte o entrega de comida en distintas ciudades del mundo y que también facilita a personas de diferentes perfiles generar o complementar sus ingresos al registrarse como conductores o repartidores, es uno de los ejemplos más representativos de esta tendencia cada vez más adoptada en el país.
No es para menos. Partiendo de los datos arrojados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en los cuales se indica que 55% de los mexicanos se encuentran trabajando de manera informal, estas alternativas de autoempleo no sólo comienzan a verse como una solución importante en la economía diaria de las personas, sino también como una posible solución a la falta de cobertura en los sistemas de pensiones, pues como sucede en el caso de DiDi, hoy los usuarios cuentan con la posibilidad de incorporarse al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de manera voluntaria.
DiDi se ha convertido en un alternativa al empleo tradicional que por representar ingresos para sus conductores y repartidores es altamente valorada. Así lo demuestra un estudio realizado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en colaboración con DiDi, que a través de una serie de encuestas, logró evidenciar el por qué las personas que ingresan a la plataforma para prestar sus servicios se sienten satisfechas por los beneficios que logran obtener.
Para empezar, la encuesta logró identificar que, frente a la falta de empleo formal y a la situación de desempleo, muchos decidieron unirse a DIDI, oficio que valoran como alternativa al empleo tradicional.
Otro de los beneficios que han descubierto los conductores es la libertad que la aplicación les ha entregado, pues, según la encuesta, un 64% de los conductores señaló que no dejaría de usar DiDi aunque tuvieran acceso a un trabajo tradicional de tiempo completo, y que preferirían continuar prestando el servicio esporádicamente.