Colombia es un país tan diverso que se da el lujo de tener hasta 800 tipos de papas. Aprovechando tanta variedad, Infobae, de la mano de expertos cocineros, se dio a la tarea hacer este recetario en donde este tubérculo es la clave del sabor

La papa es tan rica que hasta ha sido motivo de estudio. Sobre su origen en América del Sur, pasando por su evolución y sus diversas clasificaciones se han realizado innumerables análisis. Y la razón radica, según un artículo publicado en la revista ‘Agronomía colombiana’ en el hecho de que, en un tiempo relativamente corto, se convirtió según la FAO en uno de los alimentos más importantes en el mundo.

Así las cosas, en un país como Colombia donde según Fedepapa y el Fondo Nacional de Fomento de la Papa (FNFP), este tubérculo se siembra en nueve departamentos (Santander, Norte de Santander, Boyacá, Cundinamarca, Tolima, Caldas, Nariño, Cauca, Antioquia) y donde existen aproximadamente 800 variedades, este alimento se ha convertido en uno de los más presentes en las dietas de los colombianos.

La papa es tan importante, que según el DANE (Departamento Administrativo Nacional de Estadística) hace parte de la canasta básica. Las razones principales están vinculadas a la facilidad para acceder a él, que, si bien se cultiva en muchas zonas del país, por su durabilidad, precio, sabor y características nutricionales es uno de los favoritos.

La papa es un carbohidrato que está catalogado como un alimento funcional, pues cuenta con minerales como hierro, fósforo, calcio, potasio y vitaminas como B1, B3, B6 y fibra.

Estas características no solo permiten que el hecho de consumirla genere saciedad, sino que, a la vez, incluirla en diversas preparaciones (cocinada, horneada o frita) ya sea al desayuno, al almuerzo o la cena, aporte al organismo la energía que requiere para mantenerse en pie.

“Los alimentos ricos en carbohidratos son una parte importante de una dieta saludable. Los carbohidratos proporcionan glucosa al cuerpo, que se convierte en energía que se utiliza para apoyar las funciones corporales y la actividad física (...) Las fuentes más saludables de carbohidratos (granos integrales, vegetales, frutas y frijoles sin procesar o mínimamente procesados) promueven la buena salud”, señala la escuela pública de salud de la Universidad de Harvard.

Pero curiosamente la papa no es solo carbohidratos. Expertos de Fedepapa y del FNFP señalan que especialmente las que son amarillas aportan también proteínas. Esta característica, facilita que, al ser consumidas, sean de mejor asimilación comparadas con el trigo, el arroz y el maíz, lo que permite dejar a un lado la creencia de que su consumo hace subir de peso.

En tal sentido, optar por las más comerciales o fáciles de encontrar, ya sea la papa criolla, la papa Pastusa, la R12 y la papa Sabanera u otras menos comunes, como las papas nativas, abre la posibilidad a descubrir sabores diferentes llegando a preparaciones fáciles, económicas y deliciosas, que pueden estar presentes a diario en el plato que se pone sobre la mesa.