Originalmente, el modelo formaba parte de una línea de calzados de PUMA que homenajeaba a algunas de las ciudades europeas más famosas, como Londres, Inglaterra; Oslo, Noruega, y en este caso, Palermo, Italia.
Con el paso del tiempo, las Palermo -especialmente populares entre los británicos- se transformaron en un must-have para los cazadores de tendencias. En respuesta a este fenómeno, PUMA decidió regresar este modelo, aunque con algunas innovaciones.